Bésame cómo
sólo tú lo has hecho.
Tras esos
años, largos años de eternidad.
Tras ese
infinito instante de perennidad.
Bésame
lento, pausado, suave.
Bésame
rápido, frenético e indecente.
Bésame.
Tócame. Acaríciame cómo sólo tú lo has hecho.
Desnúdame. Lámeme.
Quiero ser tuya.
Atrápame en
tu red, enrédame.
Quiéreme
cómo nunca lo has hecho.
Deséame
como siempre lo harás.
Átame a tu
mente, a tu alma, a ti.
Llévame al
paraíso que siempre soñamos.
Piénsame
con tu mente, con tu boca, con tu piel.
Piénsame
con el último poro de tu ser.
Abre tu
alma a mis sentidos
Y unamos
nuestras bocas hasta el amanecer.
Unamos
nuestros cuerpos hasta perecer.
Unamos
nuestras manos hasta desaparecer.
No hay comentarios:
Publicar un comentario